domingo, 16 de febrero de 2014

Cage the elephant - Shake me down.


"Una hamburguesa es cálida, tiene fragancia y es jugosa... Es a la vez la más espiritual y la mas sensual de las formas... es social y ligeramente erótica. Tu eres lo que crees que comes."


Este que veis aquí es mi amigo Pablo da Cunha. Él y mi amiga Mariquiña descubrieron este sitio paseando una tarde por Tribunal, aquí en Madrid. Lo que llamó la atención a mi amiga obviamente fue la oferta y no dudó en comentármela, así que hace unos cuántos días más tarde decidimos ir y probarlo: una hamburguesa, patatas y refresco.


Esta es una parte de la hamburguesería por dentro. Ya he visto en algún local más el detalle de la pared de pizarra para que la gente escriba lo que le apetezca. La primera vez me pareció un detalle bastante original, es entretenido leerlas y más si todo va acompañado de una música realmente agradable. Los clásicos de los 70 y 80 sonaban mientras disfrutaba de una deliciosa comida y una grata compañía. 

Pero he ahí mi sorpresa cuando vino el camarero y nos colocó los salvamanteles que eran, a su vez, la carta. Observadlos vosotros mismos:




¿Hamburguesa de CEBRA? ¿de CABALLO? ¿de CANGURO? ¿de JABALÍ? Pues sí, sin embargo la que entraba en el menú era de ternera. No sé si me atreveré algún día a volver y probar alguna con carne exótica, pero quiero creer que sí, al fin y al cabo siempre es una experiencia. En tal caso prometo comentarla aquí, pero ya aviso que dudo que vaya a ser pronto. Ese día Mariquiña y yo decidimos empezar por unos nachos con queso como entrante, que la verdad estaban muy buenos. Además la hamburguesa, para ser parte de un menú, era bastante completa: cebolla, tomate, queso, lechuga, pepinillos... Como se suele decir, una imagen vale más que mil palabras y como yo siempre llevo la cámara encima (aunque sea la del móvil):



Si os soy sincera y emitiendo una opinión personal, la comida me ha gustado, el local estaba limpio y era cómodo. El servicio no destacaba por su simpatía pero tampoco se puede decir que fuese desagradable, nos atendió y punto. Si os preguntáis si volvería la respuesta es sí; es más, lo recomiendo y espero que aquellas personas que vayan me den también su opinión.


Pero a Mariquiña y a mí esto nos parecía poco, así que decidimos ir al centro y comernos un helado, por aquello que dicen de que ayuda en la digestión. Si queréis ver nuestro "Banana Split" aquí lo tenéis:


Antes de finalizar esta entrada, me gustaría hacer una breve crítica sobre la película que he visto ayer.


La primera película que he visto de Quentin Tarantino es "Pulp Fiction" y la verdad es que me gustó, así que esta semana fui a la biblioteca de mi universidad en busca de "Oficial y Caballero" porque tenía muchísimas ganas de verla cuando, de pronto, vi esta en el estante. No pude resistir la tentación de cogerla también y anoche la vi. 

No sabía de qué iba, mis amigos me hablaron de ella, pero me encanta esa sensación de empezar una película siendo un misterio. Lo mismo me ocurre con los libros. Lo que pensé en la primera hora de película fue "Tarantino y la sangre, la sangre y Tarantino" pero realmente creo que los personajes están trabajados, sus diálogos y sus historias. Adoro la banda sonora que decide poner, creo que si lo hubiese intentado hacerlo mejor probablemente la hubiera pifiado. 

Llegado el momento de la pelea en blanco&negro solamente se me ocurrió el comentario de "esta escena es a "Kill Bill" lo que el abrigo rojo a "La lista de Schindler"". Mis amigos ya me habían comentado que la causa de ese detalle era la falta de sangre falsa y el hecho de tener que buscar una solución para seguir rodando y, en mi opinión, no por ello deja de ser un detalle bueno, característico, como decirlo... ¿atractivo? 

Sin duda alguna esta es una de esas películas que hay que ver antes de morir pero a más de uno le puede resultar desagradable. Me muero de ganas por ver el VOL. 2, así que es probable que toque el próximo fin de semana.
¡Un saludo!



-Alba Enríquez.

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